Título: Ten un poco de fe (Have a Little faith)
Autor: Mitch Albom
Nº de páginas: 272 pág.
Año: 2010
Cartoné con sobrecubierta: precio 18,00€
Mitch nunca ha sido muy religioso. Aunque educado en el seno de una comunidad judía, el hecho religioso siempre ha resultado algo secundario para él. Por eso queda muy sorprendido cuando el octogenario rabino de su comunidad le pide que, cuando llegue su hora, sea él quien pronuncie su discurso fúnebre. Esta propuesta inesperada da pie a repetidos encuentros entre el ya cuarentón Mitch y el viejo rabino que ve que la hora de su muerte no puede estar muy lejos; así es como, al filo de las conversaciones, Mitch vuelve a entrar en contacto con la religión y empieza a replantearse su propia espiritualidad. Paralelamente, vamos descubriendo la historia de Henry, criado en un ambiente hostil que en poco tiempo toma el camino de la delincuencia y la drogadicción. Años más tarde, tras pasar por la cárcel y estar a punto de ser asesinado, Henry se ha convertido en otra persona siempre dispuesta a ayudar a los demás en la pequeña comunidad que ha creado.
Opinión:
¿Sabéis esos libros que por mucho que quieras no te pueden dejar indiferente? Pues este es uno de ellos. He llorado con el, he reído y he reflexionado sobre que pienso, que sé, lo que creo que soy y en lo que creo. Para empezar no es un libro religioso simplemente, es la historia de dos grandes hombres y como cada uno influyó en la vida del autor.
Me ha gustado porque te hace comerte un poco el coco, no es la historia en la que te escabulles de tus problemas es la historia que te hace que te acuerdes de ellos, te hace pensar en las persona que has tenido o tienes de pastores, si son o han sido tus mentores. Me dio pena encontrar que no, que nunca tuve la suerte de tener a mi lado personas como Rebe o Henry Convignton.
He reflexionado sobre los profesores que he tenido y lo poco que han influenciado de una manera positiva en mi vida, y que a la mayoría venían y hacían sus trabajos.
Al terminar el libro he acabado con el deseo de poder ser una mentora para alguien en esta vida, en preocuparme por las personas y estar a su lado, aunque solo sea para que lloren en mi hombro.
Desee por un momento hacer algo importante con mi vida, pero no perseguir lo obvio, si no perseguir estar contenta y cantando como hacía el Rebe. Poder sonreírle a la vida sin tener una razón aparente. Dejar de pensar en mi misma y pensar en los demás, y hacerlo de manera desinteresada.
Poster de la película basada en el libro. |
Puede que si no eres cristiano practicante, o no sabes exactamente a que cultura y religión perteneces este libro te sea un recurso de respuestas a muchas de tus preguntas, un alivio para los que se encuentran un poco perdidos y necesitan algo más.
Pero para los que ya sois cristianos, o judíos o de la religión que sea, ya que este libro no excluye a nadie. Es un recordatorio de lo que somos humanos, de que hay bondad, hay personas que han sufrido y sufren pero deciden ya no vivir ellos sino, vivir para y por lo demás. Y creo que un pensamiento así es hermoso. Somos muy egoístas hoy en día, no nos comprometemos con nada, pero hay algo bonito y que da honra a las personas que son comprometidas y buenas personas. A pesar de las lágrimas, ahora estoy sonriendo porque este libro haya caído entre mis manos.
La vida es más simple de lo que pensamos, somos nosotros los que intentamos complicarlo todo.
Así que ten un poco de fe :)
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