5 Sentidos

5 Sentidos

Sin mis cinco sentidos, no sentiría dolor, ni temería a la oscuridad, 

ni heriría con mis palabras a los demás y oiría su menosprecio ni su insensibilidad.

Podría acercarme a fuegos sin temer, y ser una con él 

y su humo no me asfixiaría ni mi nariz resentiría.

Podría ser yo misma y sin pretender ser otra, 

ni peligrosa ni blanda, ni guapa ni fea ni lista ni tonta.

Lograría lo inlograble y la gente ni siquiera se enteraría.

Para que tener dos ojos si aunque pudiera ver todas las maravillas del mundo, 

no les daría importancia y destruiría lo más bello por un saquito de dinero.

Para que oír la ignorancia de la gente y frustrarme porque aun así ellos quieren enseñarme.

Para que hablar si los demás de todas formas no me van a escuchar.

Para que crear con mis dedos telas más finas que la seda 

y solo unos pocos disfrutarían de ellas.

Cinco sentidos tenemos y a los cinco despreciamos.

Solo un corazón tenemos y a este también engañamos.

Si la cosa no fuese acerca de tener más sino al revés, 

sin con un sentido nos bastaría para hacer mil maravillas 

y te aseguro que podrías, 

seríamos más ligeros, livianos y ricos que cuando intentamos tenerlo todo y no conseguimos nada.

Alégrate, porque puedes sentir el rocío y el suave viento que te envuelve y roza ligeramente tu piel.

Que puedas correr, gritar y disfrutar de tu libertad por pequeña que sea, incluso en tu propia celda. Alégrate porque tienes la oportunidad de probar todos los sabores que se te puedan antojar, 

porque puede que el día de mañana ya no puedas.

Alégrate porque tienes una voz con la que te puedes expresar  

y no estás sujeto a leyes que solo ponen un jugo encima de tu libertad.

Mira a tu alrededor y descubrirás qué afortunado eres en comparación con los demás.

Y sobre todo aprovecha cada segundo para expresar tu amor hacia los demás 

porque puede que hoy sea el último día que los verás.

Si los demás quisieran cortarte las alas solo porque ellos no pueden volar, 

tienes un pico muy fuerte con el que puedes luchar.

Y aquí termina mi moral.

Porque yo también caigo y seguiré haciéndolo aunque sepa la verdad.

Pero me levantaré y volveré a caer y por mucho barro que me tiren me esforzaré.

A ser mejor mujer, a ser feliz y sobre todo a agradecer porque hoy puedo creer.